Retroceder un paso para intentar avanzar

Estos días las temperaturas se han disparado a niveles casi veraniegos, por lo menos en las horas centrales del día, por lo que se acumula el trabajo de transplante, incluso tendré que dejar alguno para después de la defoliación, que ahora no me da tiempo.

Como prioridad he decidido cambiar de maceta algunos árboles que tenía desde hace muchos años y que habían soportado el largo tiempo que había dejado la afición abandonada. Me dediqué, sobre todo, a unos ejemplares de Buxus sempervirens que había obtenido hace unos veinticinco años y que, desde entonces, estuvieron siempre plantados en maceta, constatando últimamente una disminución en su vigor que hizo en ocasiones que me plantease deshacerme de ellos y plantarlos en la huerta como seto...

Son todos mediocres, tirando a malos. Como tengo sitio, decidí pasarlos a una maceta mayor, para que en cinco o seis años que estarán en ella vayan brotando y teniendo más fuerza para modelarlos. El sustrato, en vez de gastar en akadama, pómice o similares, tierra normal de huerta, mezclada con tierra de plantas y gravilla de sílice. Al boj creo que le gusta más este tipo de tierra (más pesada y compacta) que la de grano, así también aguantará más la humedad.

El primero sufrió varios accidentes a lo largo de los años, de tal manera que se quedó prácticamente con una rama

Y así quedó, con una posición de plantado bastante peculiar, pensada para un proyecto que tengo en mente con este ejemplar

Y él motivo de no mandarlo para la huerta es, precisamente, su corteza

El segundo es uno de esos trabajos que no llevan a ningún sitio, pero que al final, con tantas vueltas que le damos, se convierten en un inquilino de nuestra terraza sin que sepamos bien el porqué.

Así estaba en marzo del 2009 (cada vez que lo veo me pregunto la razón de tenerlo)

En diciembre del mismo año, un poco más denso

Noviembre del año pasado, 2011, con el jin más pequeño e intentando bajar una rama para compactarlo

Y, finalmente, en maceta más grande, ya sin la rama inferior, convertida en jin, para intentar que densifique (siempre hay tiempo de regalárselo a alguien, sobre todo a mi madre para ponerlo en la huerta)

El tercero estaba más formado y, realmente, me gustaba más. Entonces ¿por qué pasarlo a maceta de cultivo? Así estaba en noviembre del año pasado después de dejarlo crecer más o menos libremente, sobre todo para mantener ramas importantes para el futuro diseño

Un desafortunado accidente hizo que la rama básica para cubrir un hueco en la izquierda se perdiese, por lo que quedó así



Entre esta pérdida y lo que me parecía disminución de vigor hicieron que me plantease pasarla a macetón de cultivo. Quería recuperar un empuje que tenía, por ejemplo, en el 2007, a pesar de llevar diez años plantado en la misma tierra, dura y compactada.

Una imagen de la corteza en aquel momento

 Y la corteza ahora, mi mejor motivo para conservar el ejemplar

Dicho y hecho. Poda estilo seto, extracción del recipiente en que estaba y peinado de raíces. No estaba tan mal, después de todo

Y así quedó

Aprovechando que quedaba algo de día, también transplanté un ciruelo que había recuperado el año anterior y del que había sacado un acodo que puse en otra entrada. Todavía estaba plantado en una maceta en tierra de la huerta que, después de lavada mostró unas raíces bastante aceptables. Plantado en una maceta no muy apropiada (pero es la que tenía), y mezcla de pómice y akadama de grano grueso espero formar este año el comienzo de las ramas principales con los brotes nuevos que vayan saliendo.