lunes, 24 de junio de 2013

Defoliado de Castanea sativa: resultados

Siguiendo con los experimentos de esta temporada, después del Prunus domestica de la entrada anterior le tocó el turno a los castaños (Castanea sativa) pasar por la "peluquería". El castaño que había comprado en el Congreso Gallego de Bembibre el año pasado estaba así a primeros de mayo
 

A finales del mes pasado, el día 23, para ser más precisos, las nuevas hojas ya estaban maduras, por lo que decidí llevar a cabo un defoliado parcial, que en teoría serviría tanto para reducir un poco el tamaño de hoja como para provocar más ramificación al activar yemas que no se habían desarrollado todavía
 

Decidí efectuar primeramente un pinzado de las ramas, dejando, aproximadamente cuatro o cinco hojas, procediendo después a un defoliado parcial. Es importante tener en cuenta la fortaleza de las yemas de cada hoja. Así, las dividí según el tamaño, grandes, medianas y pequeñas.
 
Las hojas grandes las corté por el pecíolo totalmente. Van asociadas a yemas fuertes, normalmente coincidiendo con las puntas de la rama, por lo que no tendrán problema en volver a brotar.
 
Las hojas medianas procedí a cortarlas por la mitad, con un corte ligeramente inclinado, para simular en lo posible las hojas originales (cuestión de estética, nada más). Las yemas de estas hojas son fuertes todavía, pero para igualarse con las anteriores necesitan la ayuda de la parte de hoja que queda para que broten sin problemas.
 
Finalmente, las hojas de tamaño pequeño no las toqué. El objetivo de esta defoliación parcial es intentar igualar las distintas zonas de la rama, para que puedan brotar por igual las yemas situadas a lo largo de la misma.
 
El aspecto final, aunque la fotografía quedó muy mal, se puede intuir
 

Unas dos semanas después, el día 9 de junio, las yemas ya comienzan a moverse, las de mayor tamaño, que correspondían a las hojas retiradas completamente, llevan un poco de adelanto
 



Sólo tres días después, el día 12 de junio, el avance es perfectamente visible
 



Un par de días de buen tiempo (de los pocos que hubo) y el 14 de junio las nuevas brotaciones ya apuntaban...
 



Su aspecto general en este momento era el siguiente
 


Como se aprecia en las fotografías anteriores, la defoliación del castaño ha resultado bastante bien. La evolución en un mes ha sido muy buena, con una nueva brotación que ha formado gran número de nuevas ramitas. El resto del año sólo será cuestión de abonar y regar para que maduren, y el año que viene se podrá hacer una selección de las mismas, alambrarlas y volver a repetir el proceso para ir consiguiendo ramificación, aunque sin olvidar los problemas de secado de ramas y ápices de esta especie y que pueden tirar por la borda cualquier trabajo de modelado.
 
El día 22 de junio, es decir, un mes después del trabajo, el aspecto del castaño era ya muy diferente al que tenía, no solo recuperando, incluso mejorando la imagen anterior.
 


 
Aguardo que haya sido de interés el resultado de este nuevo experimento de defoliado. Creo que no ha salido tan mal, después de todo...

jueves, 20 de junio de 2013

Defoliado en un Prunus domestica: resultados

El ciruelo (Prunus domestica) protagonista de esta entrada lo recolecté hace cuatro años en un solar cercano en el que iban a edificar. Originalmente era un árbol de unos tres metros de altura, de los que aproveché el primer metro del tronco.

Lo tuve plantado en una maceta de plástico, hasta que un año después lo empleé como conejillo de Indias para experimentar con los acodos. Precisamente la fotografía siguiente es de marzo de 2011, un poco antes de separar la parte superior, ya enraizada, que no constituyó un gran material, pero me sirvió y me sirve para practicar
 

Un año después lo podé y transplanté por primera vez. Las raíces no se habían desarrollado mucho, por lo que, para facilitar la creación de un buen cepellón opté por usar un sustrato de grano grueso, mezcla de pómice y akadama


Naturalmente, se puede entender perfectamente, cuanto más lo miraba más me sobraba gran parte del tronco, por lo que a lo largo de ese mismo año 2011 reduje su altura a menos de la mitad, para formar de nuevo el ápice con los nuevos brotes que fuesen surgiendo, intentando así ganar una conicidad que no tenía. La poda no recuerdo muy bien cuando la llevé a cabo, sobre agosto o septiembre.
 

Finalmente, a comienzos de febrero de este año 2013 procedí al transplante a una maceta de entrenamiento de plástico. La anterior era amplia de tamaño, pero pesaba mucho y, además, ya tenía inquilino para ella (uno de los pinos comprados en Bembibre). El pan de raíces con la mezcla gruesa de sustrato no estaba muy mal
 

Y el corte realizado en la parte inferior del tronco para dejar plana la base de raíces estaba cerrando muy bien
 

Después del transplante, ahora con pómice y akadama de grano medio, el ejemplar estaba preparado para crecer...
 
 
 
A comienzos de mayo el crecimiento había superado las expectativas, pero todo se reducía a brotaciones largas y rectas, sin ramificación secundaria.
 
 
 
Para intentar aumentar la ramificación decidí defoliarlo, aunque no sabía como respondería el ciruelo a esta técnica. Decidido a experimentar pincé todos los brotes a cuatro hojas y corté por el pecíolo todas las  hojas excepto la última de cada brote. Para mantener un flujo de savia dejé esta hoja, no me fuese a cargar el árbol.
 
Lamentablemente no pude hacer fotografías del proceso. Un mes después, a comienzos de este actual de junio, muchas yemas habían respondido al defoliado. Naturalmente las más fuertes son aquellas correspondientes a la hoja que había dejado, pero he conseguido activar otras yemas traseras que formarán ramas nuevas. Así estaban el día 5 de junio
 


Y unos días después, el 12 y 14 de este mismo mes de junio







Como resultado de estos trabajos, el Prunus domestica ofrece ahora este aspecto, con un poco más de ramificación secundaria
 

El ápice no lo he tocado. Tiene que crecer bastante hasta conseguir un poco más de grosor antes de cortarlo dejando unos centímetros. También ayudará a cerrar un poco el corte del tronco. En la maceta se observa un brote que he enterrado para que enraíce y pase a formar parte del futuro nebari.
 


Lo conseguido no es mucho, pero algún resultado sí se aprecia en el aumento de ramificación. Seguiré utilizando este sistema los próximos años y veremos qué se puede lograr con tiempo y paciencia.

 
 

domingo, 16 de junio de 2013

Flores de junio

Como este año el tiempo ha sido un poco raro, con muchos días oscuros y mucha humedad, ahora en el mes de junio todavía he podido disfrutar de la floración de algún manzano que había dado por perdido, ya que no acababa de brotar. Llegué a pensar que se había secado, pero al final le llegó la hora, aunque hace sol un par de días y luego la lluvia estropea las flores
 
 


El Prunus lusitanica casi ha finalizado de abrir sus bonitas flores blancas


La fresa silvestre (Fragaria vesca) muestra unas cuantas fresas y flores en la imagen de hace unos días. Ahora ya no tiene fresas maduras... me las he comido...
 

Y, finalmente, también floreció otra de las azaleas de jardín que había adquirido en vivero y que no serán satsuki, pero también dan alegrías y funcionan bastante bien en maceta. Después del primer modelado y paso a maceta de bonsái había quedado muy pobre, como se ve en esta imagen de hace un año
 

Y después de otra poda un mes después
 

La había adquirido, principalmente, por la parte inferior del tronco, con una pequeña zona de madera muerta


Hace un par de días ya la floración estaba en su recta final. Con la humedad del invierno hasta las azaleas lo han pasado mal, y no pude disfrutar de tantas flores como otros años
 

Tocaba suprimirlas y llevar a cabo un adecentamiento de la superficie del sustrato, sobre todo de unas plantitas "tocapestañas" que colonizan todo y compiten realmente con los árboles por el alimento y por el sustrato, pues tienen unas raíces fuertes y extendidas
 

Paciencia, dedos y pinzas...
 



El resultado, después de retirar las flores y limpiar el sustrato
 

Dentro de unos días procederé a la poda y alambrado para ir formando el esqueleto de la azalea. Transplante le toca el año que viene, por lo que mientras tanto seguiré disfrutando de la esquina de la maceta... pero este frente es mejor que el que antes tenía en mente. El pequeño detalle de madera muerta de la base me sigue gustando
 

Y como no podía ser menos, finalizo la entrada con un primer plano de las protagonistas, las preciosas flores de esta azalea