viernes, 18 de enero de 2013

Un experimento... que creo que no quedó tan mal

Ya cansado de transplantar plantoncillos todos estos días, y aprovechando que con el mal tiempo poco se podía hacer fuera de casa, me dediqué a experimentar un poco con la madera... sólo con ánimo de probar. Me animé a realizar un daiza sencillo para una piedra sin mucho interés que tenía.
 
Los materiales fueron mínimos: una navaja, escofina, papel de lija... y nada más. El elemento más importante, la madera, de las llamadas "blandas", pues era un pedazo de madera de abeto que tenía por casa. No me importaba tanto la calidad, sino disfrutar un poco y practicar, para ver si podía hacer algo decente o no.
 
Me dediqué a este tema unos cuantos días, a ratos perdidos, sin agobios. Lo primero fue marcar el asiento de la piedra, de lo que no tengo fotografías. Después pasé a rebajar con navaja todo el contorno, sobrando todo esto
 

 
Y quedando algo así
 



Me olvidaba de mostrar la piedra, de carácter granítico, escogida por la incrustación de cuarzo en la parte superior simulando algo de nieve en la cumbre... ¡y también porque era ovalada y más sencillo el diseño del daiza!
 

El siguiente paso marcar la distribución de las patas, retirar lo sobrante con la navaja e ir puliendo con la escofina gruesa, aproximándose un poco al diseño final
 


Después de una sesión de lijado la "cosa" parece que mejoraba un poco
 

Necesité tiempo para decidir si hacer o no otra cosa en el daiza: firmarlo... estuvo a punto de quedar como obra anónima para que generaciones futuras no me relacionasen con este desastre. Al final, empleando un alambre de hierro al rojo con el que fui quemando la madera dibujé (bastante mal, pero se mejorará) una B y una X, ya que me daba pereza poner Buxán completo (¡y sólo son cinco letras!) y también ya comenzaba a sentir el calor del alambre (del hambre no... pero un poco también, que lo estaba calentando en el hornillo de la cocina mientras se hacía la comida)
 

Rematé el pobre daiza con un tinte para madera que tenía por casa, que tampoco era el más adecuado, pero era lo que había, y un poco de cera para muebles. Al final así quedó
 




Realmente no es ninguna maravilla, pero para ser el primer daiza que hago me conformo. Tiene muchos errores, tanto en las patas como en el grosor de la madera, ya que éste debía ser bastante menor y en el tinte que no dio un resultado uniforme... pero he disfrutado realizando esta pieza.
 
Esta explicación no pretende mostrar nada nuevo ni técnicas depuradas, pues no hay nada de eso. Sólo deseaba indicar que casi sin herramientas, usando madera de poca calidad, con no mucho trabajo y aún siendo un "manazas" se puede hacer una base bastante decente, que no sirve para una exposición, pero para poner en mi casa, de aficionadillo principiante, va de lujo, se siente uno satisfecho y se disfruta trabajando... que al final es lo que de verdad cuenta.
 


 


24 comentarios:

  1. Claro que se disfruta, yo hice dos hace unos cuatro años y me lo pasé pipa, eso si,no las enseño porque me da vergüenza, quizás algún día me anime. Coincido contigo en que te ha quedado demasiado gruesa la daiza, pero para ser la primera está bien. Supongo uqe la conoceras pero te recomiendo la página de Rafa Monje, http://www.suiseki-rafaelmonje.com/

    sus daizas son para babear.

    Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Para ser la primera prueba no quedó tan mal, además se hizo con lo que tenía por casa, para otras intentaré mejorar. Anímate a enseñarlas, si yo lo hice... las tuyas seguro que están mucho mejor.
      Como dije mi intención al mostrarla era animar a más gente a hacerlas, no necesariamente con maderas duras o nobles, pero sobre todo probar y disfrutar de su realización.
      La página de Rafael Monje la conozco y no sólo los daizas son para babear ¡que anda que las piedras!
      Un beso

      Eliminar
    2. Yo tuve el placer de visitar su casa, y desde que entras estás con la boca abierta y babeando.

      Eliminar
    3. Me lo imagino, me lo imagino...

      Eliminar
  2. Ja¡ja¡ja¡ otro que a sucumbido a la madera. Ten cuidado que como me dijo Liñares engancha, y tu ya tienes bastante vicio criatura.

    Me quito el sombrero, aunque como tu mismo dices se puede mejorar. Enhorabuena César, como se suele decir lo importante es participar y pasárselo bien.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Se puede mejorar, y mucho (nada que ver con tus trabajos, que eso ya es otra cosa), pero como se dice por aquí "para quen é o burro ben val a albarda" , o sea, que para el pobre aficionadillo que soy ha quedado sobrada, y yo realizado.
      Los siguientes trabajos espero que queden mejor, pero lo primero es ver si para de llover para comenzar a transplantar... pero entre transplante y transplante... ;))))))
      Un abrazo. César.

      Eliminar
  3. Estoy viendo que al final todos "daicistas" jejeje.
    Los hiperactivos podemos ser un problema como no tengamos algo entre las manos.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡No tendré bastante que hacer para ponerme con otras cosas! Muy bien no ha quedado, llevo de recuerdo algún raspón y corte en las manos... pero he disfrutado como un "condenao"... mereció la pena, desde luego.
      Un abrazo Ángel.

      Eliminar
  4. Buen trabajo
    Entre tú y Carlos me habéis animado a probar... empezaré también con madera blanda (no sé cuando... :))
    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No tan bueno, pero para ser el primero y para probar he quedado satisfecho. A ratitos perdidos se disfruta un montón y seguro que te quedan de maravilla, mucho mejor que mis daizas. La madera blanda es mucho peor, pero más fácil de trabajar... para gustos... para mi me sirve ;))))
      Gracias Jordi. Un saludo. César.

      Eliminar
  5. Muy buen trabajo, no tienes de que avergonzarte, al contrario. Si acaso disminuir el grosor de la daiza, pero eso ya será para la próxima. La piedra, muy vistosa y el conjunto ha quedado muy bien. Al final me van a obligar a mí a meterme a artesano. Tengo una bolsa llena de piedras interesantes pero mi torpeza con las manos y mi poca paciencia hacen que no me decida a intentarlo, aunque la verdad es que me apetece, hasta me he comprado las herramientas.
    Un abrazo y felicidades por el trabajo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Anímate que repetirás seguro. Las próximas pruebas intentaré hacerlas con madera más delgada. En este caso pude retirar más madera por la parte inferior, pero... decidí terminarla para ver el resultado. A ratos perdidos ya verás como en poco tiempo tienes una magnífica coleccion de piedras con sus daizas.
      Un abrazo y muchas gracias Antonio.

      Eliminar
  6. Lo importante es que te has decidido y ese debía ser el objetivo de este primer acercamiento. No te voy a engañar porque ya lo sabes, pero aun tienes margen de mejora, jajaja. Las maderas blandas con vetas tan marcadas no dan un acabado homogéneo, si eso te disgusta tendrás que cambiar a otras calidades.

    Un abrazo y enhorabuena por haber dado el primer paso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Totalmente consciente de que hay mucho que mejorar (la teoría la sé...), pero para comenzar está bien. El objetivo de mostrar esta "cosa" era animar un poco a otros aficionados a intentarlo, que para tener en casa tampoco está tan mal... (es que me estoy motivando jajajaj)
      Primero practicar y después pasaré a otras calidades de madera, con otras calidades de piedras, naturalmente ;))))
      Un abrazo Juan, y gracias por los ánimos.

      Eliminar
  7. El mas largo de los caminos empieza con un primer paso.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo importante es comenzar. Con la práctica no se llegará a la perfección, pero por lo menos espero ir mejorando... y disfrutando el camino.
      Un abrazo. César.

      Eliminar
  8. Pues para ser la primera vez, no te ha quedado nada mal.
    Yo hice hace dos años una daiza, y después de ver el resultado no he vuelto a hacer ninguna más. Lo mío no son los suisekis ni las daizas, por eso me fascina ver estos trabajos.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Seguro que la tuya quedó mucho mejor que la mía... Soy consciente de que tiene muchos fallos y que la madera no es la más apropiada, pero lo he pasado bien haciéndola y tampoco la piedra es gran cosa...
      Yo creo que sin agobios, a ratos perdidos, podemos probar ha hacer cosas así que no servirán para una exposición, pero para nuestro disfrute van "sobradas" y poco a poco se le va pillando el truquillo...
      Gracias Carlos. Un abrazo. César.

      Eliminar
  9. te ha quedado perfecta.
    un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por ser tan benevolente, pero tiene muchos fallos, que intentaré corregir en las siguientes... que seguro que las hay.
      Un abrazo, amigo. César.

      Eliminar
  10. Cesar,para ser la primera experiencia no esta del todo tan mal,seguro que los que han empezado en este mundo también les saldría a si o peor.

    Tu por lo menos te as atrevido,yo sigo esperando el momento a empezar.

    Pues que sepas que aunque tenga fallos a mi me gusta la composición.

    Un abrazo,jose.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias José. Intentaré ir mejorando en las siguientes, lo importante es comenzar. Anímate, que estas un tiempo distraído y pasándotelo bien entre pruebas, lijado, tintado... si tienes alguna piedra que te guste prueba que al final... te gustará más.
      Un abrazo. César.

      Eliminar
  11. Desde luego que son compatibles con el bonsai.
    Para lo rudimentario de tus medios te has esforzado bastante.
    Te darás cuenta que es mejor usar maderas mas duras, son mas agradecidas al trabajo de talla.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Para "tomar contacto" con la madera, y para unas piedras sin mucho interés que tenía tampoco me quise complicar mucho buscando madera de mayor calidad... pero al final, vistos los medios con que contaba, no he quedado desencantado, que era lo que me proponía.
      Tengo posibilidades de obtener recortes de maderas duras que en el futuro seguro que emplearé en otras piedras que voy recolectando.
      Mientras tanto voy convenciendo a mi mujer de que no estoy mal de la cabeza y no quiero llenar la casa de piedras, que también quedan bonitas jajajaja.
      Un saludo José.

      Eliminar