Anteriormente ya hice referencia a la historia y a las características más sobresalientes de la conocida como Tulla de Outeiro de Fafián, por lo me limitaré a insertar otras fotografías del monumento. Así es el exterior de la misma
Y el interior, colonizado por verdaderos árboles, conservando todavía restos del piso de madera que cubría los sótanos de la misma
Pero si hay algo verdaderamente impresionante son los castaños que bordean el edificio, poniendo en peligro en algún punto la integridad del mismo. Se trata de árboles centenarios que deberían conservarse en la medida de lo posible
En esta con mi compañero, gran amigo y mejor investigador Francisco Rubia, con quien se llevó a cabo el trabajo sobre los pazos de Deza publicado por la Diputación de Pontevedra, ambos al lado de un buen ejemplar de castaño
También en los alrededores hay edificaciones interesantes y más castaños centenarios
Incluido un bonito palomar roquero, pues al estilo de los antiguos castillos, se ubica en lo alto de una roca granítica. Su aspecto era el siguiente allá por el año 2000
Y en el 2004, cuando volví a visitar la torre, la sorpresa de verlo perfectamente restaurado, con una estampa magnífica
Finalizando aquí el recorrido por uno de los elementos patrimoniales destacados del ayuntamiento de Rodeiro, con el deseo de que su conocimiento contribuya a la conservación y restauración, no sólo del edificio en sí, sino del paisaje aledaño, tanto lo construido por el hombre como lo creado por la naturaleza, constituyendo una herencia para generaciones venideras.
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