viernes, 6 de julio de 2012

Tres años de una pequeña haya

A comienzos del 2009 había adquirido en un vivero un número de plantones de haya (Fagus sylvatica) para hacer una plantación en un terreno y conseguir que engrosasen. Con uno de ellos decidí efectuar un experimento y cultivarlo siempre en la misma maceta de bonsái. Su estado en marzo de ese año era así de pobre



En diciembre de ese mismo año 2009 había crecido un poco. Aquí con mi ayudante preferido cuando tenía dos añitos (¡cómo pasa el tiempo cuando lo veo ahora!)


La siguiente imagen que tengo de este árbol es de dos años después. Lo había transplantado el año anterior, pero manteniendo, como me había propuesto, la misma maceta


Este invierno lo podé ligeramente y alambré algunas ramas y en junio de este año este era su estado, a falta de una limpieza de las malas hierbas



Y, finalmente, en estos últimos días, ya con la maceta más adecentada y algún otro retoque de alambrado, siendo curioso que haya una segunda y tímida brotación, debida, quizá, al clima de este año. También se observa como la hoja ha reducido su tamaño con respecto a años anteriores



Cuando la observo en su estado actual compruebo que es necesario crear más volumen y movimiento en la primera rama, que tiene que engrosar y es demasiado recta. También la zona posterior carece de ramificación, pero los pinzados y la poda de invierno han provocado la existencia de pequeñas yemas latentes que espero activar y fortalecer... en los próximos años. Nunca será un gran ejemplar, pero su cultivo no es difícil y creo que puede formar un arbolito agradable... tiempo de regalarlo o plantarlo en el suelo siempre habrá.



2 comentarios:

  1. Las hayas.. una de las especies que mas me gustan, pena que en mi clima sea complicado su cultivo. No se te ocurra regalarlo, dentro de unos años estará muy bonita, ademas seguro que el ayudante se enfadaría.
    Un saludo César.

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    1. Las que tengo plantadas en tierra van mejor, pero con esta me entró la cabezonería de tenerla siempre en la misma maceta (experimentos que hace uno), así va de lenta.
      El ayudante ahora prefiere regar con la manguera... y de paso mojarse... se me parece, es cabezota!!!
      Un saludo. César.

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